El tomate es uno de los alimentos más consumidos y valorados en nuestra dieta, no solo por su sabor y versatilidad, sino también por su riqueza nutricional. Cuando elegimos tomate ecológico certificado, estamos optando por un producto que va más allá del sabor: apostamos por una opción más saludable, respetuosa con el medio ambiente y con beneficios reales para nuestro organismo.
BENEFICIOS DE CONSUMIR TOMATE ECOLÓGICO CERTIFICADO
- Rico en antioxidantes naturales como licopeno, vitamina C y polifenoles, que ayudan a prevenir el envejecimiento celular y enfermedades cardiovasculares.
- Puede ayudar a reforzar el sistema inmunológico. Gracias a su perfil más rico en micronutrientes y compuestos bioactivos, los tomates ecológicos pueden contribuir a un sistema inmune más fuerte.
- Ausencia de transgénicos. Los tomates ecológicos certificados no contienen organismos modificados genéticamente, lo que reduce el riesgo de posibles efectos adversos aún debatidos en la salud a largo plazo.
- Contribuye a un mejor equilibrio intestinal. El consumo de productos ecológicos favorece una microbiota más diversa, ya que se evitan aditivos, conservantes y residuos químicos que pueden afectar negativamente a la flora intestinal.
- Sin residuos de pesticidas ni fertilizantes químicos sintéticos. Al estar libres de pesticidas sintéticos, los tomates ecológicos reducen el riesgo de acumulación de residuos tóxicos en el organismo, lo cual es especialmente relevante para la salud hormonal y neurológica.
- No contiene aditivos artificiales.
Uno de los principales atractivos del tomate ecológico es su composición nutricional. Estos tomates son especialmente ricos en antioxidantes naturales, como el licopeno, la vitamina C y los polifenoles. Estos compuestos tienen un papel fundamental en la protección de las células contra el envejecimiento y el daño oxidativo, contribuyendo a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y otros problemas de salud asociados al estrés oxidativo.
Además, el proceso de cultivo ecológico favorece que el tomate contenga una mayor concentración de micronutrientes y compuestos bioactivos que refuerzan el sistema inmunológico. Esto es especialmente importante en un contexto en el que mantener las defensas en buen estado ayuda a prevenir infecciones y mejorar la salud general.
Otro aspecto fundamental es que el tomate ecológico certificado está cultivado sin el uso de pesticidas sintéticos ni fertilizantes químicos. Esto no solo es beneficioso para el medio ambiente, al proteger la biodiversidad y evitar la contaminación del suelo y del agua, sino también para la salud humana. Al consumir tomate ecológico reducimos la exposición a residuos químicos que pueden tener efectos adversos, especialmente a largo plazo, sobre el sistema hormonal y neurológico.
También es importante destacar que los tomates ecológicos están libres de organismos modificados genéticamente, lo que garantiza la naturalidad del producto y aleja cualquier incertidumbre sobre los posibles efectos de los transgénicos en la salud.
Desde el punto de vista digestivo, los tomates ecológicos contribuyen a mantener un equilibrio saludable de la microbiota intestinal. Al no contener aditivos, conservantes ni otros componentes artificiales, favorecen una flora intestinal diversa y robusta, lo que se traduce en un mejor funcionamiento del sistema digestivo y en una mejor absorción de los nutrientes.
Por último, el sabor del tomate ecológico certificado es incomparable. El cultivo respetuoso con el medio ambiente y las prácticas agrícolas tradicionales permiten obtener un producto más sabroso, fresco y natural, que conserva todas sus propiedades organolépticas.
En definitiva, consumir tomate ecológico certificado es una decisión que nos beneficia a nosotros y al planeta. El sello del Craega garantiza que estos tomates cumplen con los estándares más exigentes de calidad y sostenibilidad, por lo que confiar en él es garantizar una alimentación más saludable, segura y responsable.
RECUERDA BUSCAR EL SELLO
Es importante prestar atención al etiquetado de los alimentos escogidos para asegurarnos de que realmente son ecológicos:
- El logotipo ecológico europeo consiste en una hoja perfilada con estrellas sobre fondo verde; este es siempre obligatorio acompañado del código de control de nuestra comunidad autónoma ES-ECO-022-GA.
- El sello de garantía Craega es la etiqueta que demuestra que el alimento fue producido de manera respetuosa con el medio ambiente sin la intervención de elementos, componentes o procesos químicos. Se obtiene después de demostrar de manera fidedigna que el producto es totalmente ecológico, con controles en cada fase de la producción, elaboración y comercialización cumpliendo con la normativa del Reglamento (UE) 2018/848 del Parlamento Europeo y del Consejo.